Un nuevo estudio avisa: hacer ejercicio puede reducir el avance del cáncer
¿Pueden apenas 60 minutos de ejercicio a la semana ayudarnos a reducir el avance del cáncer? A esta conclusión ha llegado un nuevo estudio.
Escrito por Noelia
Redactora de Bloom especializada en salud femenina. Diplomada en Turismo por la UNED, Máster en Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa por la Universitat Jaume I y Posgrado en Periodismo Digital por la Universidad Rey Juan Carlos. Redactora en medios de comunicación digitales desde 2011.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Aunque es la tarea pendiente de muchas, hacer ejercicio es uno de los mejores actos de amor propio que podemos tener con nosotras mismas. Sus beneficios son incalculables y un nuevo estudio del British Journal of Sports Medicine vuelve a sumar una nueva ventaja. ¿Sabías que hacer ejercicio puede ayudar a reducir el avance del cáncer?
No hace falta ser un atleta profesional, incluso con pequeñas píldoras de actividad física a diario podemos obtener innumerables beneficios y un freno para ciertos tipos de cáncer.
Con apenas 60 minutos de actividad física a la semana se puede reducir la mortalidad del cáncer
En este estudio, llevado a cabo por un equipo de la Universidad de Johannesburgo (Sudáfrica) se han tomado en cuenta los datos de más de 28.000 pacientes con cáncer y se han segmentado teniendo en cuenta su nivel de actividad física: sin ella, con 60 minutos a la semana o con más de 60 minutos a la semana.
Con 60 minutos de ejercicio a la semana ya podemos obtener mejoras en nuestra salud.
Aquí se ha encontrado la clave de la relación del deporte a la hora de reducir el avance del cáncer. Y es que, según las conclusiones de este estudio, aquellos pacientes que habían sido físicamente activos en el año anterior al diagnóstico presentaron una mejor evolución de la enfermedad.
Como decíamos, no hace falta ser atleta profesional, aunque a mayor nivel de actividad física se obtienen mayores beneficios. De hecho, este estudio menciona que “los altos niveles de actividad física en comparación con niveles más bajos en pacientes con cáncer pre y/o postdiagnosticado se han asociado con una reducción del 18% en la mortalidad específica por cáncer”. Sin embargo, con apenas 60 minutos semanales de deporte ya se encontraron mejoras respecto a aquellos pacientes que no realizan actividad física o que es inferior a una hora semanal. ¿Pueden menos de diez minutos al día marcar la diferencia? Cuanto más, mejor, pero puedes empezar por esto si llevas años en una vida sedentaria.
La clave para reducir el avance del cáncer podría estar en el sistema inmunitario
Según las conclusiones extraídas en este estudio, uno de los principales beneficios de la actividad física es que refuerza el sistema inmunológico, un factor clave en los pacientes oncológicos. Al aumentar las defensas de nuestro organismo, también se puede mejorar las expectativas ante un cáncer.
Por otro lado, la clave también podría estar en las hormonas. Ya sabemos (en Bloom somos muy “pesadas” con este tema) que las hormonas tienen un alto impacto en nuestra salud física y mental. Con el ejercicio podemos regular el nivel de estrógenos, pero también ellos pueden hacer lo propio con los niveles de testosterona, por lo que la actividad física podría tener mayores beneficios en aquellos cánceres relacionados con las hormonas, como el cáncer de mama o el cáncer de próstata.
Asimismo, según apunta el Instituto Nacional del Cáncer, en diversos estudios se ha encontrado que el estrés crónico puede empeorar el cáncer. El motivo estaría en la liberación de las glucocorticoides, un tipo de hormonas esteroides que pueden afectar en el proceso de apoptosis (un tipo de muerte de células tumorales), aumentando así la probabilidad de metástasis y la resistencia a la quimioterapia.
En este punto, conviene destacar que otro de los beneficios del ejercicio tiene que ver con la reducción del estrés, la mejora de la calidad del sueño y su impacto positivo sobre la salud mental del paciente.
Otros de los beneficios del deporte, incluso en un nivel bajo o moderado, es que fortalece el sistema cardiovascular, disminuye los niveles de colesterol y ayuda a mejorar la capacidad pulmonar, entre otros.
El organismo del ser humano no funciona de manera aislada. Somos un todo, un conjunto de funciones, órganos, hormonas y células que deben trabajar conjuntamente de la mejor forma posible. Y no decimos que el cáncer se vaya a curar saliendo a correr los sábados, pero sí que podemos afirmar, con las evidencias científicas sobre la mesa, que los beneficios del deporte sobre la salud están más que comprobados. ¿Cuándo es el mejor momento para empezar? No esperes al próximo 1 de enero, al siguiente lunes o a que haga mejor tiempo. Hoy es el mejor día para comenzar un nuevo camino a una vida más saludable.
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