¿Existen los alimentos afrodisíacos? Cómo tu dieta puede ayudar a tu vida sexual
Champán y ostras, fresas con nata, bombones… Hay ciertos alimentos que figuran en el imaginario colectivo como afrodisíacos, pero, ¿tienen alguna eficacia o solo quedan bien en las pelis?
Escrito por Sara G. Pacho
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, estilo de vida y feminismo. Licenciada en Sociología por la Universidad de Salamanca y en Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Máster en Comunicación como Agente Histórico-Social, especialidad en Lenguaje Audiovisual por la Universidad de Valladolid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Es una noche especial: además de velas, una música suave y un conjunto de lencería sexy, sobre la mesa hay una bandeja de ostras y una botella de champán bien fría. En la nevera, aguardando su turno en el postre, unas espléndidas fresas. ¿Te suena? Hemos visto ese uso de los alimentos afrodisíacos miles de veces en películas y series. Quizá incluso nos hayamos sentido tentadas de reproducir la escena para dar una sorpresa a nuestra pareja y un punch a nuestra libido.
Pero, ¿realmente hay comida afrodisíaca? Desvelamos este misterio y te proponemos algunos tips para que tu dieta ayude a mejorar tu vida sexual. Bon appétit!
First things first: qué son los alimentos afrodisíacos
Cuando hablamos de alimentos afrodisíacos o comida afrodisíaca, hablamos de aquellos comestibles a los que se atribuye el poder de aumentar el deseo sexual. Con estas propiedades, no es de extrañar que sea una búsqueda recurrente en Google, pero, ¿de verdad funcionan?
La respuesta es contundente: no. La ciencia no tiene evidencias de que el champán, las ostras o el chocolate sean alimentos afrodisíacos y tengan la capacidad de excitar a nadie, al menos por sí solos.
Otra cosa es lo que acompañe a ese manjar, claro. Y es que la excitación sexual es una respuesta bioquímica del cuerpo en la que intervienen muchos factores, no solo una caja de bombones. El flujo sanguíneo, las hormonas y, por supuesto, las características socioculturales de cada una son decisivas a la hora de provocar ese deseo.
Ahora bien: como no queremos echar por tierra una cena deliciosa, te diremos que, en el contexto adecuado (y con la persona adecuada, of course) sí que hay algunos alimentos que pueden favorecer el flujo sanguíneo y, por tanto, estimular las ganas de tener relaciones sexuales.
Más que alimentos afrodisíacos… afrodisíacos naturales
Ahora que sabemos que no hay ningún alimento mágico que te ponga en el mood a la velocidad a la que Clark Kent se convierte en Superman, te diremos que sí que hay algunos bocados que pueden ayudarte a aumentar el apetito sexual.
Spoiler: olvídate de encontrar en esta lista esas cosas que en tu cabeza tenían la categoría de sexy.
- Maca. Es una planta originaria de Perú que incide en el sistema nervioso. Es común encontrarla en los herbolarios como alternativa al café, por ejemplo, pero también puede influir en la libido, según algunos estudios científicos. Normalmente se comercializa en polvo y se puede tomar en zumos, batidos, yogures…
- Ginseng. Esta raíz de origen chino se suele recomendar para contrarrestar el agotamiento, pero, además, según algunas investigaciones científicas, puede potenciar la libido. Se puede consumir a modo de suplemento o incorporar a nuestros platos como aderezo.
- ¿Qué tienen en común el salmón, el aguacate, la calabaza y las nueces? Todos estos alimentos contienen un aminoácido llamado arginina que aumenta el flujo sanguíneo.
- También comparten un compuesto la cebolla, el chocolate, las uvas y el vino tinto. Se trata de la quercetina, un fitonutriente que tiene propiedades antiinflamatorias capaces de mejorar el flujo sanguíneo.
- El picante también potencia el flujo sanguíneo, pero siempre conviene tomarlo con mesura, para evitar que la noche sea inolvidable por otros motivos.
La comida es en todas las culturas un elemento para conectar con los demás (o con una misma, why not). Comer es un placer y, si así lo queremos, una experiencia ultra sensorial muy top tanto si estás sola como si compartes plato con alguien. De ahí a que algunos elementos vayan a hacer la magia hay un trecho. ¿Nuestra recomendación? Ver la comida como un elemento más del juego y, como tal, jugar y disfrutar con ello.
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