Vuelven las cejas ultrafinas y nos preguntamos: ¿es posible revertir el desastre?
Igual ahora te parece una buena idea, pero conviene preguntarse si son reversibles
Seguramente más de una vez hayas tenido en tus manos esa prenda de ropa con la que un día te sentiste la reina de la pista pero que, de repente y como por arte de magia, te horroriza y te hace preguntarte cómo pudiste alguna vez llevar puesta tal cosa. Quizá haya terminado en algún contenedor de ropa, quizá ocupando el armario de otra persona que la viera con buenos ojos. Quizá, por nostalgia, decidiste hacerle un hueco tu armario a modo de recuerdo cringe. Pasan los años y, una vez más, de repente y como por arte de magia, esa prenda te vuelve a encantar. ¿Qué ha pasado?
Que la moda es cíclica es algo que vas aprendiendo cuando otras generaciones te dicen que eso que llevas ya lo llevaron ellas, o cuando notas en tu propia piel que has dado la vuelta entera con ella. Este año hemos visto cómo los 2000 asomaban la patita sin ningún tipo de vergüenza: pantalones de tiro bajo, botas de plataforma, tops ajustado, ¡cinturones de cadera! y, sí, las cejas ultrafinas.
Tras el boom de las cejas gruesas, ¿vuelven las ultrafinas?
Cuando hablamos de moda, vamos mucho más allá que la ropa y los complementos. También nuestro cuerpo se adapta a ese imperativo social. Lo que para una generación es estéticamente horrible, para otras lo peta. Y luego está lo de las cejas ultrafinas, una tendencia que ya cuestionamos entonces y que a día de hoy nos preguntamos cómo ha sido capaz de volver a hacerse un hueco.
Quienes apostaron por seguir la tendencia hace 20 años no tardaron en darse cuenta de que era peligrosa: era fácil engancharse a las pinzas hasta el punto de acabar siendo una persona sin cejas. Ver las fotos de aquellos años puede ser demoledor. Pero lo peor no es eso, sino querer revertir esa estética y descubrir que no es posible.
A principio de los 2000 se llevaban las cejas mínimas, súper definidas y “limpias”. Cualquier pelo que se atreviera a asomarse más allá del marco establecido era condenado a la extinción. Teníamos pinzas y no teníamos miedo a usarlas.
En los últimos años, las cejas gruesas y rebeldes, al estilo Cara Delevingne, han ganado la batalla y quienes vivimos aquellos años de pobreza capilar sobre nuestros ojos lo hemos celebrado. No solo porque nos pareciera, quizá, más estético (nuestro gusto se moldea por las modas), sino porque también nos parecía más natural. Menos esclavo.
Pero, todo vuelve y las cejas de los 2000 han decidido hacer su reaparición.
¿Son reversibles las cejas finas?
Como tenemos un antecedente no muy lejano, sabemos que la depilación excesiva tiene consecuencias. De hecho, no es casualidad que la técnica de microblading haya estado tan de moda últimamente. Y es que las cejas son capaces de cambiar la expresión de la cara.
Consejo bloomer: antes de coger las pinzas pregúntate seriamente si merece la pena perder la forma de tus cejas naturales por seguir una moda previsiblemente pasajera.
¿Es posible que las cejas dejen de crecer? No se da en todo los casos, pero sí: el abuso de la depilación puede afectar tanto al crecimiento del vello como a su pérdida, aunque es cierto que también pueden interactuar otras cuestiones más personales y hormonales.
¿Qué debemos tener en cuenta antes de depilarnos las cejas?
La depilación casera puede llevar a errores irreversibles, por lo que si has decidido apostar fuerte por esta tendencia, será mejor que lo hagas en un centro especializado. Si vas a atreverte a hacerlo en casa, se recomienda agarrar el pelo por la base con la pinza, sujetar la piel y estirar en el sentido del crecimiento. Como ves, aunque muchas veces lo hacemos de manera rudimentaria, tiene su ciencia.
Revertir un desastre en depilación de cejas
Si te has aburrido de esta tendencia y quieres volver a lucir unas cejas más pobladas y naturales, la primera recomendación es que dejes que crezcan libres para que recuperen su forma original. Si este crecimiento es lento o nulo, recurrir al microblading puede ser tu opción. Se trata de un maquillaje semipermanente que dura de 12 a 18 meses. Así darás tiempo suficiente a las cejas para que recuperen su forma.
Respecto a los productos para favorecer el crecimiento de las cejas que se han hecho virales, como el aceite de ricino o los sérum de cejas, tenemos que tener en cuenta que para el primero no hay evidencia científica y que, de escoger el segundo, tenemos que revisar los ingredientes y apostar por marcas confiables.