Sexo anal por primera vez: cómo iniciarse paso a paso, ¡guía completa!
Te contamos todo lo que necesitas saber sobre cómo hacer sexo anal por primera vez. Cuidados y recomendaciones para la práctica.
Escrito por Noelia
Redactora de Bloom especializada en salud femenina. Diplomada en Turismo por la UNED, Máster en Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa por la Universitat Jaume I y Posgrado en Periodismo Digital por la Universidad Rey Juan Carlos. Redactora en medios de comunicación digitales desde 2011.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Que si duele, que si es un lugar solo de salida, que si solamente lo practican los homosexuales… ¡Stop mitos! El sexo anal puede ser para todas y se puede convertir en una práctica muy placentera. Porque, amiga, saber cómo disfrutar del sexo anal no tiene que ser tan complicado como piensas.
Ser más open minded y aprender cómo practicar sexo anal nos puede ayudar a exprimir todo el placer que nos puede dar tu cuerpo. Y cuando decimos todo, es TODO.
Sexo anal por primera vez: lo que debes saber
Sexo anal: ¿qué necesito saber antes?
La primera vez que se practica sexo vaginal también es algo nuevo y desconocido y, sin embargo, no por eso dejamos de intentarlo. Todo es cuestión de práctica y el sexo anal no es una excepción. Hay muchas dudas en torno a cómo hacer sexo anal y esto es por dos motivos: tapujos y desconocimiento. Aquí estamos para ayudarte.
Lo primero que tienes que saber antes de practicar sexo anal por primera vez es que el sexo anal es doloroso si no utilizas lubricante. Esta es una de las principales claves para saber cómo disfrutar el sexo anal. Pero, si nunca lo usas para la penetración vaginal, ¿también lo necesitas? Rotundamente: sí. Y te explicamos por qué. La vagina tiene un mecanismo natural de lubricación y esto facilita mucho la práctica sexual. Sin embargo, el ano no tiene esta lubricación, por muy excitada que estés no vas a lubricar nada por el culete, por lo que es IM-PRES-CIN-DI-BLE que emplees lubricante.
Mucho lubricante y relajación: Esto es lo que necesitas para el sexo anal
La preparación en el sexo anal es una de las claves para disfrutarlo. ¿Cómo prepararse para el sexo anal? El punto más importante es que tienes que querer hacerlo. Muchas veces se hace por complacer a la otra parte o con la mente llena de miedos. Así no. Si lo haces, que sea porque a ti también te apetezca explorar este nuevo camino hacia el placer. Por lo tanto, debes estar relajada y tranquila para que todo fluya, el ano dilate mejor y la penetración, ya sea con el pene, con un juguete sexual o con los dedos, vaya bien.
A muchas personas les gusta hacerse una lavativa antes. Con un enema que puedes comprar en farmacias puedes hacerlo. Consiste en limpiarte por dentro y así evitar que haya restos. No es un paso imprescindible, pero tal vez te ayude a estar más tranquila y a extremar la higiene.
Más consejos para el sexo anal en mujeres: ahora que estás relajada y tranquila, llega el momento de lubricar. Mucho. Unta el lubricante en los dedos e introdúcelos en el ano. Hazlo cuantas veces necesites: tres, cuatro, cinco… hasta que estés bien lubricada.
Cómo tener sexo anal por primera vez: paso a paso
Aquí va un resumen del paso a paso para tener sexo anal por primera vez:
- Relájate y libera tensiones. Quizá necesitas apoyo de técnicas de relajación como el mindfulness, quizá es suficiente para ti con unas respiraciones profundas o igual te resulta de lo más útil un momento de intimidad con música y velas con tu pareja.
- Si lo consideras, haz una lavativa. Te ayudará a extremar la higiene.
- Lubrica MUCHO la zona para que todo fluya. Este es un paso clave, así evitarás el dolor y maximizarás el placer.
- Elige una postura en la que estés cómoda.
- Empieza poco a poco. Lo ideal sería que probases primero con algo delgadito, como un par de dedos o un juguete sexual para que vaya dilatando y te acostumbres a la nueva sensación.
- Utiliza preservativo para evitar las infecciones de transmisión sexual
Cómo practicar sexo anal sin dolor
El sexo anal no tiene que doler. Y esto es algo que debes tener muy claro, tanto tú como tu compi de cama. Si duele, parad y probad de otra forma. Las primeras veces, por falta de dilatación, quizá te cueste un poco más, pero poco a poco te irás acostumbrando y disfrutándolo más.
También debes tener en cuenta que la sensación, aunque no sea dolorosa, te puede resultar “rara” al principio. Relájate, abre la mente y disfrútala.
Mejores posturas para tener sexo anal por primera vez
¿Cuál es la mejor postura para el sexo anal? No hay un consenso claro y es que, al igual que en la penetración vaginal, a cada persona le puede gustar más de una manera o de otra. Sin embargo, por la posición natural del ano, la clásica postura del misionero (quizá con tus piernas levantadas) puede ser una buena forma de estrenarse. Además, al estar tumbada en la cama estarás más relajada que si estás en perrito o de pie. Desde esta posición, también puedes ayudarte estimulando el clítoris o los pezones.
¿El sexo anal tiene riesgos?
Todo contacto sexual tiene riesgos y, en el caso del sexo anal, aunque no hay probabilidad de embarazo, tienes que tener claro que hay riesgo de infecciones de transmisión sexual, por lo que es esencial el uso de preservativo, el único método para prevenir las ITS en el sexo anal. Además, si no lubricas bien o lo haces de una forma demasiado forzada, podrías tener algún desgarro o fisura en la zona. Recuerda también que no debes pasar de la vagina al ano sin limpiar previamente o sin cambiar el preservativo, ya que el riesgo de infecciones se dispara.
El sexo anal con hemorroides se desaconseja porque podría empeorarlas, aunque en este punto tenemos que desmentir un mito y es que NO te van a salir hemorroides por practicarlo.
Beneficios del sexo anal
El principal beneficio del sexo anal es que es liberador. Te ayudará a eliminar tapujos, a conocer mejor tu cuerpo y a abrir tu mente. Además, aunque no lo parezca, el ano es una zona erógena con muchísimas terminaciones nerviosas, por lo que los orgasmos pueden ser de película. Obviamente, es muy probable que no lo consigas la primera vez que hagas sexo anal. Pero, con el tiempo y lubricante, puedes encontrar una nueva forma de tocar las estrellas.
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