
La Unión Europea ha decidido regular sobre el retinol. ¿Cómo afecta esto a la industria de la belleza y a nuestra piel?
La Unión Europea va a limitar la concentración de retinol en los productos de belleza. Hemos hablado con dos dermatólogas para entender esta medida y cómo nos afecta.
En los últimos años, hemos vivido una auténtica revolución en el campo del cuidado de la piel. Poco a poco, hemos comenzado a entender más acerca de esos ingredientes que se encuentran en los productos que nos aplicamos. O, al menos, les hemos puesto nombre. Uno de ellos, el retinol, se ha convertido en una especie de piedra Rosetta para la piel. Un descubrimiento que, como consumidoras, hemos acogido e integrado en nuestras vidas como si fuera un auténtico milagro.
Sin embargo, a partir de este mismo año el retinol es objeto de regulación por parte de la Unión Europea. Para entender mejor cómo nos afecta, qué riesgos tenemos y qué podemos hacer si ya hemos “retinizado” nuestra piel, hemos hablado con la Dra. Marta Prieto y con la Dra. Elena Martínez, ambas dermatólogas, para hacer zoom en esta cuestión y comprender cuál es nuestro camino como consumidoras de este principio activo.
¿Es el retinol un ingrediente realmente “milagroso”? Esto dicen los estudios
La Dra. Marta Prieto nos explica que el retinol “es un derivado de la vitamina A de gran eficacia y es de los principios activos tópicos con mayor evidencia científica en dermatología. Los retinoides son muy útiles en el tratamiento de patologías como el acné, la rosácea, el melasma o simplemente como cosméticos antienvejecimiento”.
El retinol es uno de los mejores principios activos en dermatología
Pero, ¿cómo trabajan los retinoides? “Su mecanismo de acción implica una expresión de genes en nuestra piel que favorecen la proliferación de las células, la reducción de la hiperproducción sebácea y de la inflamación y un aumento de la producción de colágeno y de ácido hialurónico”, explica la doctora Prieto.
Sin embargo, no están exentos de riesgos. También hemos querido hablar acerca de sus posibles efectos secundarios con ella y nos indica que el retinol “puede dar lugar a efectos secundarios, principalmente en forma de pelado excesivo, sequedad o eczemas, si no se utiliza de forma adecuada. La mayoría de los efectos indeseables del retinol se producen por una mala dosificación y siempre son fácilmente solventables en manos de un profesional. Echarse retinol es similar a hacer spinning, es muy beneficioso, pero no puedes empezar a hacer 2 horas todos los días si no has hecho deporte en tu vida. Hay que ir empezando poco a poco y aunque al principio haya algo de agujetas, el cuerpo se irá acostumbrando hasta hacerse fuerte”.


Asimismo, numerosos estudios han avalado sus buenos resultados, por ejemplo, en este estudio del Departamento de Dermatología de la Universidad de Michigan se concluye que “los retinoides tópicos han demostrado ser prometedores para mejorar la textura de la piel, disminuir las líneas finas y aumentar el grosor de las capas epidérmica y dérmica”.
En este otro estudio, capitaneado por Patricia Farris, dermatóloga y profesora en la Facultad de Medicina de la Universidad de Tulane en Nueva Orleans, se probaron los resultados del retinol tópico al 0,1% y se encontraron “mejoras significativas en las patas de gallo, las arrugas faciales, el tono de la piel desigual, las manchas marrones y el fotoenvejecimiento general”.
Por lo tanto, y teniendo siempre presente que no existe ningún producto milagro y que sus resultados dependen de cada caso, las investigaciones dan por bueno el retinol para retrasar el envejecimiento de la piel, pero siempre con precaución. Por ejemplo, es importante tener en cuenta si se puede usar el retinol en verano.
Cómo nos afectan las regulaciones de la Unión Europea respecto al retinol
La Unión Europea ha entrado a hablar sobre el retinol y en su Reglamento (UE) 2024/996 de la Comisión, de 3 de abril de 2024 emitió unas nuevas directivas respecto a su uso en los productos cosméticos:
- Los productos faciales podrán tener una concentración máxima del 0,3%
- Los productos corporales podrán tener una concentración máxima del 0,05%
Se podrán conseguir productos con una concentración de retinol superior, siempre que se cuente con una prescripción médica.
¿Tiene sentido esta limitación? La dermatóloga Prieto considera que “en los últimos años hemos experimentado un boom del ‘skincare de TikTok’, convirtiéndose casi en obsesión desde edades muy tempranas. Es por esto que, hasta cierto punto, es normal que se intente regular la potencia de aquellos productos a los que se puede acceder sin supervisión médica.”
¿Y qué pasa con el retinal?
Es otra duda muy habitual y también hemos querido consultarla con la Dra. Prieto. Nos ha explicado que “se podrán seguir adquiriendo otros principios activos, como el retinaldehido, el retinil propionato o palmitato o el retinoato de hidroxipinacolona que de momento no estarán sometidosa estas limitaciones. Además, estos se podrán combinar con el retinol para conseguir cosméticos de alta potencia”.
¿Cómo va a reaccionar la industria? La dermatóloga nos indica que “lo previsible es que la industria se adapte y que siga habiendo productos mejores y peores. Por otro lado, los dermatólogos seguiremos teniendo a nuestra disposición retinoides en forma de medicamento con receta, así como la posibilidad de prescribir fórmulas magistrales personalizadas para cada paciente individual”.


¿Qué hago si ya he “retinizado” mi piel?
En principio, no tendrías que preocuparte. La Dra. Elena Martínez nos ayuda a entender mejor qué va a ocurrir si ya estabas usando este ingrediente. «Vas a poder seguir utilizando el retinol sin ningún problema, pero en concentraciones inferiores. Para concentraciones superiores, vas a necesitar una receta y una formulación pautada por un dermatólogo”.
¿Y si queremos buscar una alternativa? “Una de las sustituciones al retinol es el retinal, que supone, con concentraciones menores, efectos similares a los del retinol y sin tanta irritación. Otras alternativas al retinol van a ser por ejemplo otro tipo de retinoide de tercera y cuarta generación que consigue también este efecto renovador, por ejemplo, el tazaroteno, siendo este último un medicamento y necesitar una pauta por dermatología”.
La clave para un correcto uso del retinol pasa, una vez más y como ocurre con otros principios activos, por ponerse en manos de un profesional para alcanzar un tratamiento seguro y personalizado a tus necesidades.