¿Qué es la labioplastia? Cuando la cirugía estética llega a la vulva
Es una operación al alza y consiste en remodelar los labios mayores o menores para aumentar o reducir su tamaño. ¡Te contamos los detalles!
Las operaciones estéticas están a la orden del día. Los aumentos y reducciones de pecho se comparten con normalidad (muchas influencers cuentan su experiencia en las redes sociales), y algo parecido ocurre con las operaciones de nariz. Pero ¿qué hay de la labioplastia? Se habla menos de ella, pero es también una intervención al alza: se trata de una cirugía menor que consiste en remodelar los labios mayores o menores de la vulva.
Nuestro objetivo es aceptarnos tal y como somos -uno de los mandamientos de la filosofía body positive-, pero ¿por qué no elegir cambiar una parte de nuestro cuerpo si podemos y si se trata de una decisión consciente y meditada, que nos hará sentirnos más cómodas con nosotras mismas? Es tan legítimo si esa parte está a la vista de todos, como la nariz o los labios, como si es una más íntima, como nuestra vulva.
Qué es la labioplastia o ninfoplastia, la operación de los labios mayores o menores
La labioplastia o ninfoplastia se puede realizar tanto en los labios mayores como en los menores. Suele emplearse para aumentar el volumen de los labios mayores y que se vean más turgentes (una reconstrucción de labios vulvares), para reducir su grosor o para «recolocarlos» y hacer que recuperen su posición. Sí, amiga, a todas nos va cambiando la vulva con el paso del tiempo. Puede perder volumen o incluso verse «descolgada».
Por otro lado, la labioplastia puede ser para muchas mujeres el remedio a una hipertrofia de los labios vaginales. En este caso, con esta operación se busca la reducción de los labios menores, ya sea por estética o porque su tamaño y morfología suponen una molestia en el día a día: al orinar, al tener relaciones sexuales, al vestir ropa ajustada…
Para que te hagas una idea de la tendencia al alza de estos tratamientos, según cifras de ISAPS, la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética, en 2019 más de 5.500 mujeres en España pasaron por el quirófano para esta operación. Aquel año, las labioplastias aumentaron un 24,1% y se incrementaron un 73,3% desde 2015.
¿Dónde nos lleva esto? A pensar que, por qué no, debemos normalizar las conversaciones sobre nuestra vulva (hay tantos tipos de vulva como personas) y contribuir a eliminar el tabú que existe en torno a esta parte de nuestro cuerpo.
Cómo se hace una labioplastia: así es esta cirugía menor
La reconstrucción de labios vulvares o labioplastia es una intervención sencilla. Consiste, básicamente, en una incisión en la zona genital para eliminar tanto la mucosa como otras materias (piel o grasa) que generan ese exceso de volumen. En los casos de aumento de tamaño, la labioplastia se puede realizar con procedimientos como la infiltración de ácido hialurónico.
Por lo general, no se requiere hospitalización en esta operación y el procedimiento dura menos de una hora. El tipo de anestesia que se usa es local, aunque en algunos casos se puede emplear epidural o anestesia general, según lo que valore el equipo médico.
Después de la intervención, es importante mantener una buena higiene íntima, ya que esta es una zona con bastante humedad, y una mala higiene puede infectar la herida. Con unos días de reposo, en una o dos semanas se suele estar totalmente recuperada. En cualquier caso, y como en todo proceso postoperatorio, será súper importante que sigas a rajatabla las indicaciones de tu cirujano. ¡Toca ser aplicada!