Minipíldora: existe la píldora sin estrógenos y podría ser la alternativa que buscamos
Sí, hay mundo más allá de la píldora anticonceptiva más tradicional. Te contamos qué es la minipíldora y para quiénes está especialmente indicada
Escrito por Sara G. Pacho
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, estilo de vida y feminismo. Licenciada en Sociología por la Universidad de Salamanca y en Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Máster en Comunicación como Agente Histórico-Social, especialidad en Lenguaje Audiovisual por la Universidad de Valladolid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Desde que aparecieron los métodos hormonales en los años 60 y revolucionaron la anticoncepción -y la vida de muchas mujeres- su formulación ha mejorado mucho. Su eficacia se mantiene, pero la composición va evolucionando para evitar efectos secundarios y complicaciones médicas. El progreso ha llegado hasta la minipíldora o píldora sin estrógenos, una pastilla anticonceptiva que protege del embarazo prescindiendo de esta hormona.
Las píldoras anticonceptivas combinadas, la que tú conoces como píldora o pastilla de toda la vida, se compone de dos tipos de hormonas: los estrógenos y los progestágenos. Estas funcionan impidiendo la ovulación y, por tanto, el embarazo. Pero hoy vamos a descubrir una píldora desconocida para la mayoría: la píldora sin estrógenos.
Qué es la minipíldora o píldora sin estrógenos
Los anticonceptivos hormonales suelen combinar progesterona y estrógenos. Esta combinación impide que los ovarios liberen óvulos y engrosan el moco cervical para impedir que los espermatozoides puedan pasar. Sin embargo, en las últimas décadas, la comunidad científica ha lanzado nuevas fórmulas aptas para cualquier mujer, incluso para las que tienen riesgo con las combinadas: mayores de 30 años, fumadoras, mujeres con sobrepeso o en periodo de lactancia, por ejemplo.
El resultado es la minipíldora o píldora de solo progestágeno, una alternativa que prescinde de los estrógenos. Se trata de un anticonceptivo oral con un funcionamiento similar al de las píldoras tradicionales: aumenta el moco cervical para conseguir una barrera más difícil de traspasar por los espermatozoides, de manera que estos no consigan llegar al óvulo y fecundarlo.
¿Para quién está recomendada la minipíldora?
Aunque esta pregunta tendrá que contestarla tu gine evaluando tu caso particular, te adelantamos que la minipíldora está especialmente indicada para aquellos casos en los que los estrógenos pueden suponer un problema.
La minipíldora es más recomendable que otras opciones para mujeres con problemas de salud, como hipertensión o antecedentes de coágulos sanguíneos en piernas o pulmones, o fumadoras, pero también para quienes están en periodo de lactancia, por ejemplo. ¿El motivo? La píldora sin estrógenos no se asocia con riesgo cardiovascular ni con la trombosis. Y la verdad, con todos los mitos que rodean a las píldoras, con esto te quitas una preocupación de la cabeza. ¿O no?
¿Cómo se toma la minipíldora?
Igual que las píldoras anticonceptivas combinadas, la píldora sin estrógenos se debe tomar una cada día y siempre a la misma hora.
Lo ideal es comenzar a tomarla el primer día de regla y, durante la primera semana, usar otro método anticonceptivo no hormonal de refuerzo, como el preservativo. El régimen del blíster varía dependiendo de la marca, así que puedes encontrar algunas que tienen 4 días de placebo para el periodo de descanso y otras que tienen la pauta completa sin descanso.
¡Alerta despistadas! Si olvidas tomar la minipíldora un día, es súper importante tomarla tan pronto como te acuerdes y, después, continuar con el resto de los comprimidos en su horario habitual. Si tu despiste dura más de 12 horas, su eficacia podría caer, así que lo mejor es que leas el prospecto de la píldora que estás tomando para descubrir cuál es su ventana de olvido. Si ante la duda prefieres ser precavida, los siguientes 7 días al descuido deberás utilizar otro método de refuerzo en paralelo.
Nuestro consejo bloomer para evitar estos sustos (recuerda, si ese susto llega, que existe la píldora del día después) es que elijas un momento de tu jornada en el que sepas que vas a ser constante con las tomas y que, además, programes una alarma que se encargue de avisarte en caso de posible olvido.
Igual que otras pastillas anticonceptivas, la minipíldora es un método anticonceptivo totalmente reversible: puedes suspenderlo en cualquier momento sin que esto afecte a tu fertilidad.
Efectos secundarios minipíldora
Te hemos contado todas las bondades de la minipíldora frente a la píldora combinada, pero tienes que saber que también está contraindicada en algunos casos, por lo que siempre-siempre-siempre tienes que consultar con tu médico antes de comenzar a tomarla. Además, los efectos secundarios que dependen mucho de la composición de cada píldora. Es decir, NO todas las píldoras sin estrógenos son iguales, como tampoco lo son todas las píldoras combinadas.
Los posibles efectos secundarios de la minipíldora son:
- Desajustes en el ciclo menstrual, como manchado entre reglas o amenorrea
- Dolor de cabeza
- Cambios de humor
- Acné
- Náuseas
¿La píldora sin estrógenos engorda?
Es uno de los efectos secundarios que más preocupa cuando empezamos a tomar un anticonceptivo oral. Sin embargo, no hay evidencia como para señalar el aumento de peso como un efecto secundario, tampoco en las píldoras que contienen solo progesterona. De hecho, las píldoras sin estrógenos más nuevas del mercado tienen un efecto antiinflamatorio. Si quieres cerciorarte, lo mejor es que preguntes a tu gine por el tipo de píldora que te está recetando. Y no creas en mitos: ninguna te hará engordar, pero dependiendo de la fórmula es posible que favorezca la retención de líquidos y esto se puede evitar con la prescripción del tratamiento correcto.
Si después de este artículo crees que la píldora sin estrógenos podría ser una buena solución para ti, estás a tiempo de pedir consulta con tu médico. Debes saber que su papel es recomendarte las opciones que más se adapten a tu historial clínico, pero quien tiene la última palabra para decidir eres tú. Por eso, conocer todas las alternativas de anticoncepción es esencial hacia una sexualidad independiente y segura.
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