¿Cómo puede afectar el ciclo menstrual a la diabetes? Te lo contamos

El vaivén hormonal que experimentamos a lo largo del ciclo menstrual puede afectar a tus niveles de azúcar en sangre si tienes diabetes.

enero 3, 2025 Escrito por Noelia

Redactora de Bloom especializada en salud femenina. Diplomada en Turismo por la UNED, Máster en Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa por la Universitat Jaume I y Posgrado en Periodismo Digital por la Universidad Rey Juan Carlos. Redactora en medios de comunicación digitales desde 2011.

Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.

El ciclo menstrual puede ser diferente en cada mujer. No somos iguales y cada una podemos tener nuestras propias particularidades que, al final, inciden en este importante tema de la salud femenina. Desde las hormonas hasta el estrés, existen múltiples causas por las que el ciclo menstrual puede verse afectado. Si, además, existe alguna patología o enfermedad, es muy importante tener en cuenta cómo puede relacionarse con él. Por ejemplo, ¿puede afectar la diabetes a la menstruación? La evidencia científica dice que sí.

En Bloom queremos poner el foco en la relación entre diabetes y menstruación, cómo puede afectar a la resistencia a la insulina según el día del ciclo en el que nos encontremos y qué consejos conviene tener en cuenta para actuar en pro de nuestra salud.

La Sociedad Española de Diabetes explica que el baile de hormonas que tenemos a lo largo del ciclo puede afectar a nuestra resistencia a la insulina y, por tanto, alterar los niveles de azúcar en sangre.

¿Cómo se pueden relacionar diabetes y ciclo menstrual?

La diabetes es una enfermedad metabólica crónica que se representa con unos niveles elevados de azúcar en sangre. Esto, sin un control efectivo, puede desembocar en otros importantes problemas de salud. Y aunque hoy en día existen muy buenas herramientas para el control de la diabetes, es necesario que las mujeres tengamos en cuenta nuestra condición cíclica y cómo cada fase del ciclo menstrual puede ayudarnos (o entorpecernos) en este control del azúcar en sangre.

diabetes y hormonas

Según apunta la Sociedad Española de Diabetes, las fluctuaciones en las hormonas que vivimos durante las diferentes etapas del ciclo menstrual pueden tener una incidencia importante a la hora de mantener un correcto control glucémico. Durante la menstruación, puede ser más sencillo controlar el azúcar en sangre, sin embargo, hay dos etapas del ciclo que pueden conllevar importantes fluctuaciones.

Así evoluciona la relación entre el ciclo y los niveles de azúcar en sangre

  1. Etapa folicular:

    Con el aumento de los niveles de estrógeno asociado a esta etapa folicular, la mujer puede tener también un aumento de la sensibilidad a la insulina. Es decir, por lo general, el cuerpo responde mejor y tiene una mayor capacidad de controlar sus niveles en sangre.

  2. Etapa lútea:

    Aumentan los estrógenos, pero también la progesterona, lo que se puede traducir en un aumento de la resistencia a la insulina, lo que puede provocar una menor sensación de saciedad, pero también más episodios de hiperglucemia, ya que nuestras células no son totalmente capaces de administrar correctamente la insulina. Además de la información de la Sociedad Española de Diabetes, esta evidencia científica también ha quedado demostrada en varios estudios.

En resumen, se podría concluir que el aumento de estrógenos ayuda a controlar mejor el índice glucémico, mientras que el aumento de la progesterona empeora el diagnóstico por la mayor resistencia a la insulina, como apunta también este otro estudio.

¿Las personas con diabetes pueden tener alteraciones en el ciclo menstrual?

Este importante estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Pittsburg puso sobre la mesa una relación entre las diferencias en el ciclo menstrual de la mujer con diabetes tipo 1 respecto a la mujer sin diabetes. 

En los casos de diabetes tipo 1, existe una predisposición a experimentar problemas menstruales antes de los 30 años. Entre ellos, una vida menstrual más corta (con una menarquía más tardía y una menopausia más temprana) o menstruaciones más largas y abundantes.

diabetes y ciclo menstrual

¿Y qué pasa con la diabetes gestacional?

Se denomina diabetes gestacional a aquella que aparece por primera vez durante el embarazo y se da, una vez más, por la revolución de hormonas que tenemos en nuestro organismo durante esta etapa. Es muy importante controlarla para evitar problemas en el parto, en la salud del bebé y en nuestra propia salud futura, ya que una diabetes gestacional mal controlada puede, por ejemplo, aumentar el riesgo de que suframos diabetes tipo 2 en el futuro.

De nuevo, en esta etapa tenemos unos niveles elevados de progesterona (que a su vez van aumentando conforme se desarrolla la gestación), lo que puede provocar que el páncreas no sea capaz de controlar correctamente la insulina y, por tanto, derive en una hiperglucemia.

La importancia de abordar la salud con perspectiva de género (una vez más)

Biológica y fisiológicamente no somos iguales. Las mujeres diabéticas presentan unas particularidades y características que merecen ser tomadas en consideración para un correcto tratamiento y control del índice glucémico: ciclo menstrual, alimentación, insulina, ejercicio… Todo está relacionado y todo influye en la salud femenina.

¿Qué puedes hacer tú? Lo más inteligente es que lleves tu propio registro de niveles de glucosa en sangre en cada momento del ciclo. Así, podrás detectar un patrón y, junto a tu médico habitual, valorar la posibilidad de ajustar la dosis de insulina en determinados momentos del mes. Estos datos también te ayudarán a planificar mejor tus comidas, optando por alimentos con bajo índice glucémico cuando sea necesario.

Tener horarios fijos para comer y, por supuesto, no olvidarte de hacer ejercicio de forma rutinaria te pueden ayudar a controlar mejor estas fluctuaciones de azúcar en sangre.

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