La shigelosis no es una ITS, pero sí se puede transmitir en relaciones sexuales: todo lo que debemos saber sobre ella
Es una infección intestinal, sí, pero el sexo anal puede ser uno de los focos de transmisión. Repasamos sus síntomas y cómo protegernos.
La shigelosis es una infección intestinal que normalmente se desarrolla con levedad, aunque los síntomas pueden ser un poco… escatológicos. ¿Sabías que también se puede transmitir a través de las relaciones sexuales? Conocer tu cuerpo, cómo te pueden afectar ciertas bacterias y protegerte es fundamental para respirar más tranquila.
La causante de una infección intestinal: qué es la shigella
La infección por shigella o shigellas está causada por la bacteria que lleva el mismo nombre, shigella. Es bastante fácil de detectar, ya que el principal síntoma es la diarrea. ¡Cuidado! Importante diferenciarla de esos primeros días de menstruación en los que caca y regla son una pareja inseparable.
Para evitar la infección por shigella necesitas este triple check: lavarte bien las manos antes de comer o cocinar algo, no beber agua no potable y limpiar bien los alimentos crudos.
Lo principal es que es un tipo de infección que puede ser muy contagiosa. ¿Cómo? Principalmente, por contacto con las heces de una persona infectada. Si eres mami (o si trabajas en un centro infantil, por ejemplo) puede ser habitual contagiarse al cambiar pañales o al llevar a los peques al baño. Pero también se puede transmitir consumiendo alimentos que no han sido bien lavados, al beber de agua no potable o a través del sexo anal.
¡Ojo! Aunque se pueda transmitir por contacto sexual, no hay que confundirla con una ITS o ETS, como puede ser, por ejemplo, la vaginitis bacteriana. ¿Y cómo podemos protegernos de ella en el sexo anal? Como siempre decimos, el preservativo será nuestro gran aliado.
Síntomas de la shigella: cómo identificarla
Aunque el principal síntoma, como ya hemos visto, es la diarrea por shigella, hay otros detonantes que pueden darte la voz de aviso. Puede ser una infección leve, pero es muy importante detectarla lo más rápido posible para evitar transmitirla y que la bola de nieve se siga haciendo cada vez más grande.
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Diarrea
Es el síntoma del que no te vas a escapar si te contagias, sorry.
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Dolor estomacal o abdominal
Al tratarse de una infección intestinal, es muy habitual también que te duela la barriga. Ojo, si tienes dolor abdominal en el embarazo, es importante que consultes siempre con un médico para que descarte otras posibles patologías.
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Fiebre
Cualquier infección puede derivar en fiebre y este caso no es una excepción. Eso sí, no debería ser muy alta.
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Náuseas
Y, de nuevo, como estamos ante una infección de tipo intestinal, hay quien puede desarrollar náuseas o vómitos.
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Pérdida del apetito
La bacteria puede provocar que no tengamos hambre.
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Dolor de cabeza
Al final, es otro de los síntomas más habituales en la mayoría de infecciones.
Rara vez, aunque es posible, la shigella o shigelosis cursa de manera asintomática. En la mayoría de los casos, estos síntomas duran en torno a una semana.
Tratamiento de la shigella, ¿necesito sí o sí un antibiótico?
Depende. Lo que todas tenemos claro ya a estas alturas de la película es que no podemos tomar un antibiótico por nuestra cuenta, sin una receta médica. Así que si a tu amiga, a la profe de tu hijo o a tu hermana le ha ido bien un tipo de antibiótico, olvídate de automedicarte y solicita una visita con tu médico.
En algunos casos, esta infección no necesita tratamiento y los síntomas desaparecen por sí solos al cabo de una semana. Con una shigelosis leve, bastará con que sigas las recomendaciones clásicas para estas situaciones: dieta blanda, consumir alimentos antiinflamatorios, hidratarte bien… En caso de necesitar tratamiento específico, el o la especialista te podrá recetar antibióticos.
A veces solo necesitarás dieta blanda, pero en otros casos el médico te puede prescribir antibióticos
Como cualquier otra infección, se puede complicar, aunque no es lo habitual. Pero siempre conviene tener a mano el teléfono del médico para consultar y que nos haga una exploración en caso de que el dolor sea muy intenso o los síntomas duren mucho tiempo. La deshidratación grave o un tipo de insuficiencia renal pueden ser las complicaciones de esta infección.
La shigella en alimentos, ¿qué dice la OMS sobre esto?
Como ves, es una infección que bastante común y de la que nos podemos contagiar con relativa facilidad, incluso a través los alimentos. Curiosamente, a principios de 2022, la OMS alertó de un brote significativo de shigella en Europa, que despuntó especialmente en Reino Unido e Irlanda.
La shigella en alimentos se puede encontrar de forma más común en frutas y vegetales crudos (por ejemplo, lechuga, zanahoria, maíz, tomate, cebolla…), pero también en alimentos envasados al vacío con atmósfera modificada. Aunque es menos probable, también puede aparecer la bacteria shigella en la leche cruda y sus derivados. Be careful!