Dolor en los labios genitales y vulvodinia o cuando una molestia de lo más común condiciona tu día a día
Quizá no hablamos de ello todo el rato, pero es más común de lo que puede parecer.
A menudo subestimado, el dolor en los labios genitales externos puede ser incapacitante y afectar a tanto nuestra vida cotidiana como a las relaciones íntimas. Y es que se trata de una afección pocas veces comentada pero bastante frecuente, por lo que puede resultar frustrante y desalentador, primero, no saber qué nos está pasando y, segundo, no saber qué hacer por falta de conocimiento o posible estigmatización.
Si alguna vez has sufrido molestias -o te pasa de manera recurrente- en la zona de los labios genitales externos, sigue leyendo porque esto te interesa, y, si no te ha pasado, entérate para que no te pille desprevenida.
Dolor en labios mayores
Primero empecemos situando en el mapa la zona de la que estamos hablando: cuando hablamos de vulva nos referimos al conjunto de genitales femeninos que están fuera. Los que se pueden tocar fácilmente, vaya. En esta zona encontramos nuestro querido clítoris, la abertura vaginal, el orificio uretral y los labios vaginales. Estos últimos son esos pliegues de piel que guardan la abertura vaginal y que clasificamos en mayores o externos y menores o internos.
Ahora que ya los tenemos súper localizados hablemos de qué pasa cuando nos duelen. ¿Qué tipo de dolor es común experimentar? Se puede manifestar de diversas formas y a cualquier edad, desde sensaciones de ardor y escozor a inflamación y punzadas en esta zona. Es posible que sea algo leve a lo que no demos importancia o, quizá, un dolor más intenso que sí dificulte la realización de actividades diarias (como correr, caminar o, simplemente, estar sentada) y, por supuesto, mantener relaciones sexuales.
¿Por qué se produce? Normalmente es un síntoma de que algo pasa más que una enfermedad en sí misma. Puede ser desde una reacción alérgica a otros problemas médicos que tienen más que ver con una infección o una lesión. También se asocia con la vulvodinia (que te contamos más adelante), la vaginitis (te hablamos ya de ella) o bartolinitis, que es una inflamación de las glándulas de Bartolino, las responsables de secretar el líquido que lubrica la vagina.
Es frecuente que aparezcan otros síntomas asociados al dolor en los labios genitales, como picor, ardor, cambios en el flujo vaginal, enrojecimiento, inflamación y pinchazos.
Evidentemente el diagnóstico corre a cargo de la ginecóloga, que, analizando este y otros síntomas, puede llegar a una valoración personalizada y, por tanto, al tratamiento más adecuado para cada caso.
Dolor en los labios mayores y menstruación
Durante los días de la menstruación, es decir, cuando estamos experimentando cambios hormonales, pueden producirse ciertos problemas en la vulva. Puede que ese dolor -si es moderado y se ciñe a unos días concretos- no tenga más importancia y se alivie con cuidados especiales, pero si se alarga en el tiempo es posible que ese dolor nos esté señalando, al intensificarse, otra causa subyacente.
Embarazo y dolor en los labios genitales
Si hablamos de cambios hormonales tenemos que hablar del embarazo porque, además, también hay cambios físicos que pueden ser el combo perfecto para sufrir dolor en los labios externos. Todos estos cambios afectan a la pelvis, al útero y los órganos reproductores, lo que a su vez puede tener un incómodo reflejo en la zona genital. Aunque es un signo común, no tenemos que restarle importancia. Es preferible comentarlo en las revisiones para ver si la intensidad y la zona están “dentro de lo esperado” y si es posible aliviar el dolor.
Durante el embarazo, algunas de nosotras experimentamos molestias específicas en los labios mayores que pueden incluir hinchazón, sensación de pesadez y, en casos más severos, la aparición de varices en los genitales externos.
Vulvodinia: dolor crónico de la vulva
Anteriormente hemos mencionado la vulvodinia como la causante de este síntoma. Se trata de una afección crónica que se caracteriza por dolor en la región vulvar que no tiene una causa súper identificable. Puede deberse a una lesión de los nervios, a una respuesta anormal de las células a un estímulo externo, a factores genéticos, hongos, debilidad del suelo pélvico…
Además del dolor en los labios genitales mayores, puede acompañarse de sensación de ardor, hinchazón y enrojecimiento. Puede aparecer espontáneamente o de forma intermitente pero recurrente en el tiempo. Como puedes intuir ante este cuadro, se trata de un problema que a menudo no se entiende o diagnostica bien a la primera, y ahí radica la complejidad también de su tratamiento: los síntomas -como el dolor o inflamación de los labios genitales mayores- pueden abordarse con medicamentos de uso tópico (pomadas o geles) y orales, pero también con terapias física e incluso psicológicas. ¿Por qué? Es difícil identificar la causa.
¿Hay un tratamiento para el dolor de los labios genitales externos o vulvodinia?
Dependiendo de la causa que se identifique, el tratamiento puede variar. Ya hemos visto el abanico que abre la vulvodinia, pero, ¿cómo se trata si se determina otra causa?
- Si sufres una infección como la bartolinitis, los antibióticos suelen ser lo más útil. Si es una infección aguda puede ser incluso necesario plantear una pequeña cirugía para drenar el líquido de algún quiste, o incluso extirpar alguna glándula afectada.
- En el caso de la vaginitis, dependerá de la causa, ya que esta puede deberse una ITS o al uso de productos no adecuados para la vulva, por lo que puede ser que la solución sea una crema, óvulos vaginales, etc.