Mascotas y embarazo: todo lo que debes saber
¿Crees que tu perro o tu gato es más fiable que un test de embarazo? Si tienes mascota y estás embarazada, esto te interesa.
Unir mascotas y embarazo puede ser un tema que genera muchas dudas. Tanto si tienes un gato o un perro en casa y te preocupa que pueda ser malo para tu nueva situación, como si sientes curiosidad por cómo viven tus mascotas el embarazo, respondemos a todas tus preguntas en tres, dos, uno… ¡Go!
¿Los gatos sienten el embarazo?
Es muy curioso, pero los gatos pueden saber que estás embarazada incluso antes que tú misma.
No es que sean la versión a cuatro patas de la Bruja Lola, es que tienen un olfato muy desarrollado que puede percibir la variación de hormonas en tu cuerpo (hCG, progesterona, estrógenos…). Por eso se dice que los gatos detectan el embarazo de la mujer. Si notas que de repente están más cariñosos, ronronean más y se frotan contra tu cuerpo… ve a la farmacia a por un test de embarazo para salir de dudas.
¿Los perros huelen el embarazo?
En cuanto a embarazo y perros, puede suceder algo parecido. Ellos también tienen un olfato bastante desarrollado, pero, además, por lo general están más atentos a los detalles y pueden percibir si estás más cansada, si tu postura ha cambiado… Son cambios muy sutiles que a ellos no les pasan desapercibidos y, al igual que en el caso del embarazo y los gatos, también les llevan sacar su lado más cariñoso.
Gatos y embarazo: cuidado con la toxoplasmosis
Seguro que has oído hablar de la toxoplasmosis si tienes gatos durante el embarazo. Se trata de una enfermedad producida por el parásito Toxoplasma gondii. Es peligrosa para la madre, pero sobre todo para el feto. Los gatos suelen ser los portadores más habituales de este parásito y se transmite a través de las heces. Si quieres prevenirlo, lávate bien siempre las manos antes de llevártelas a la boca y evita comer frutas sin lavar ni pelar o carnes poco cocinadas.
La toxoplasmosis se transmite a través de las heces del animal, así que cuidado, porque cambiarle la arena al gato cuando estás embarazada puede convertirse en deporte de riesgo.
Perros y embarazo: ¿debo tener alguna precaución especial?
Por lo general, el perro presenta menos problemas para el embarazo, aunque, por supuesto, también podría transmitirte alguna enfermedad. Por eso, lo mejor que puedes hacer es extremar la higiene: lavarte siempre las manos después de tocarle y evitar ser tú quien se encargue de la limpieza del animal o de recoger sus excrementos.
Lo bueno, es que según algunos estudios, el hecho de convivir con perros o gatos durante el embarazo tiene un efecto significativo en el desarrollo del sistema inmune del futuro bebé, que empieza a formarse antes del nacimiento.
[inpost]¿Y si tengo otra mascota estando embarazada? Qué debes saber
En general, los animales se clasifican en estos dos grupos cuando hablamos del embarazo: gatos y animales de granja, que suelen presentar el problema de la toxoplasmosis, y perros, pájaros o tortugas, que pueden transmitir la salmonelosis principalmente, y otras enfermedades de tipo parasitario más inofensivas. En todos los casos, como había spoilers en el punto anterior, deberás tener especial cuidado con tu higiene para evitar imprevistos.
¿Cómo preparo a mi mascota para la llegada del bebé?
Por último, hablando de mascotas y embarazo, hay otro punto importante a tener en cuenta. Además de los cuidados que se deben tener durante los nueve meses de espera, hay otro punto importante: la llegada del bebé. Para que el animal no tenga celos, es importante que previamente haya olido sus cosas (ropita, cuna…) y, con cuidado, dejar que huela también al bebé cuando llegue a casa. Si se pueden hacer las “presentaciones” en la calle, mejor.
Por último, ten en cuenta que ellos también te quieren mucho y te necesitan (un poco): es normal que ahora estés más cansada y tengas menos tiempo, pero es súper importante que tu relación con ellos sea la misma de antes para que no se sientan desplazados.
Ya verás como, con el tiempo, tu bebé y tu mascota se convierten en amigos inseparables. ¡Ah! Y recuerda comunicarle a tu ginecóloga si tienes un animal en casa para que te pueda dar los consejos necesarios durante el embarazo.