Así influye el uso constante de las pantallas en nuestra salud sexual: 4 claves para una detox digital en pareja
Lo último que hacemos antes de dormir es mirar el móvil. ¿Nos hemos parado a pensar cómo influye esta costumbre en nuestras relaciones sexuales?
Escrito por Eva Gracia
Coordinadora web de Bloom. Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza. Redactora especializada en salud femenina, salud mental, estilo de vida y temas sociales. Ha colaborado en el Observatorio BLOOM sobre ITS en mujeres en España.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Interior, noche. Una pareja de entre 25 y 30 años está en la cama, a unos minutos de apagar la luz. Ambos, con las pantallas de los móviles alumbrando su rostro, hacen scroll viendo noticias, memes y las vidas de otros, sean personas famosas o amigos. Apagando al mismo tiempo la lámpara de la mesilla y la pantalla del móvil, se dan las buenas noches y duermen. Ni rastro de caricias o amago de relación sexual. Y no es cosa de un día, sino la tónica general de su rutina.
Esta escena costumbrista, que bien podría ser el inicio de una serie o película, es el día a día de muchas parejas. Vivimos pegados al móvil e hiperconectados hasta cuando estamos al borde del sueño. Sabemos que esa estimulación afecta a nuestro descanso -debemos tener más en cuenta la higiene del sueño-, pero ¿nos hemos parado a pensar cómo afecta el uso constante de la tecnología a nuestra salud sexual?
En Bloom sí, y hemos hablado con Laura Cámara, enfermera, matrona, sexóloga y divulgadora, para analizar la relación ente las pantallas y el deseo (o su falta) sexual.
“Internet y los dispositivos móviles nos permiten tener sexo por videollamada, recibir o enviar fotos eróticas o seducir por mensaje de texto. Además, podemos tener acceso a páginas de sexo explícito o aplicaciones para ligar”, contextualiza Laura.
“Pero usar el móvil y las redes nos atrapa. Nos mantiene conectados a lo virtual, cambiando el modo en que nos relacionamos. De hecho, las redes están pensadas para que nos quedemos ahí atrapadas. Esto puede reducir las conversaciones, las miradas y el contacto, perjudicar la comunicación en la pareja”, analiza.
Estar permanentemente conectados puede ser nocivo para la salud de una relación. Si, además, nos llevamos las redes y las pantallas a la cama, esto puede influir en la calidad del sueño y hacer que nos perdamos ratos de intimidad.
Detox digital en pareja: cómo reducir el uso de las pantallas
Precisamente porque las redes y las pantallas tienen un componente adictivo, puede resultarnos complicado desengancharnos. Sobre todo, si tenemos interiorizada la rutina de dormirnos, casi, con el móvil en la mano. Aquí van algunos consejos de Laura Cámara para reducir el uso del smartphone y evitar que esa conexión constante afecte a nuestra salud sexual:
Salud sexual pantallas: consejos para mejorar las relaciones
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Pactad ratos sin el móvil cerca
Ponedlo en silencio o en modo avión: eso favorecerá hablar y mantener la comunicación.
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Evitad ir a la cama con dispositivos móviles
Esto es bueno para la higiene del sueño, pero además favorecerá la intimidad.
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Emplead la tecnología a vuestro favor
No todo va a ser malo, podéis usar el sexting como aliado en vuestra relación, como un juego y parte de la seducción a la pareja.
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Las páginas de contenido explícito, mejor juntos
Usadlas de una forma en la que ambas partes os sintáis cómodas y que sirva para ejercitar la fantasía y el deseo.
El futuro de las relaciones… ¿orgasmos a distancia?
Desde hace una década, la forma de relacionarnos ha cambiado por completo. Sí, antes existía el sexo telefónico, pero ahora tenemos el sexting, sexo por videollamada y hasta los juguetes sexuales que se pueden utilizar en remoto o a distancia. ¿Cuál será el futuro de las relaciones sexuales?
“Parece que ya están llegando las aplicaciones para tener sexo a distancia que nos permitirán sentir que nos tocan y que tocamos”, nos cuenta la sexóloga, en referencia a los dispositivos hápticos, aquellos que buscan simular respuestas o sensaciones táctiles.
Es lo que también se conoce como tacto 3D y que trata de generar feelings reales a través de vibraciones o movimientos. Un paso más en la realidad virtual que, aunque de momento no está demasiado extendido, promete ser una de las grandes novedades en tecnología (y, probablemente, también en dispositivos ligados a las relaciones sexuales).
El legado positivo de la tecnología en la sexualidad
No todo va a ser negativo o distópico, ¡al contrario! El uso de la tecnología en los últimos años nos ha traído muchas cosas positivas en lo que a sexualidad se refiere.
Se ha democratizado la información sobre sexualidad, relaciones y placer, que inunda las redes y las plataformas. Esto nos ha permitido divulgar de forma eficaz, por lo que somos capaces de llegar a un gran número de personas. Aun así, no toda la info que encontramos en internet es acertada y verídica, por lo que tenemos que hacer una criba.
“Creo que las nuevas tecnologías están ayudando a deshacernos de muchos tabúes en cuanto a la sexualidad, y están haciendo que podamos hablar de muchos temas de los que, hasta hace pocos años, no se hablaban en ningún lugar”, concluye la experta. ¡No podemos estar más de acuerdo!
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