¿Cuál es la probabilidad de embarazo con la marcha atrás o líquido preseminal?
Una pista: seguro que has escuchado eso de que “antes de llover, chispea”…
Escrito por Sara G. Pacho
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, estilo de vida y feminismo. Licenciada en Sociología por la Universidad de Salamanca y en Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Máster en Comunicación como Agente Histórico-Social, especialidad en Lenguaje Audiovisual por la Universidad de Valladolid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Algunas parejas utilizan la marcha atrás o coitus interruptus para no emplear un anticonceptivo de barrera y así esquivar el embarazo. Esta práctica se sustenta en la idea de que si el semen no llega al interior de la vagina, el embarazo está descartado, pero, ¿es realmente un método seguro y eficaz? La respuesta corta es NO; además, este método no protege de las ITS. En este post te contamos en qué consiste la marcha atrás, ¡atenta! Seguro que caerá más de un mito…
La marcha atrás y su efectividad
Lo primero: ¿qué es la marcha atrás?
La marcha atrás es la acción de retirar el pene del interior de la vagina antes de que se produzca la eyaculación. Aunque pueda parecer que el triunfo de está práctica depende exclusivamente del autocontrol de quien va a eyacular, lo cierto es que existen fluidos previos (lo que popularmente suele decirse es que antes de llover, chispea), conocidos como “líquido preseminal”. Se trata de una secreción procedente de las vesículas seminales y la próstata que también contiene espermatozoides. Por lo que, a pesar de que la marcha atrás parezca una práctica sencilla y fiable, es importante entender que su eficacia es muy limitada.
Según la Organización Mundial de la Salud, un 20% de las mujeres que practican la marcha atrás se quedan embarazadas cada año. Además, advierte que este método no previene de las infecciones de transmisión sexual (ITS).
Embarazo con la marcha atrás
Como te puedes imaginar, si hay semen en el interior de la vagina, hay riesgo de embarazo, por muy poca cantidad que sea. Sí, también de embarazo en la perimenopausia. Que estos espermatozoides lleguen a fecundar un óvulo depende de más factores como la fase del ciclo menstrual. Aunque llevemos un control de días fértiles y no fértiles, tampoco debemos fiarnos al 100%, ya que puede haber irregularidades que nos den una sorpresa. Es decir, aunque es una práctica muy habitual, no se incluye entre los métodos anticonceptivos fiables ni sin riesgos a nivel de salud, como ya apuntamos en el Observatorio Bloom de ITS en mujeres en España.
Si una pareja desea evitar embarazos, se deben considerar otros métodos anticonceptivos más efectivos, como los anticonceptivos hormonales (píldoras, parches, inyecciones), los dispositivos intrauterinos (DIU) o los preservativos. Estos métodos tienen tasas de éxito mucho más altas y proporcionan una mayor protección contra el embarazo.
Con respecto a la práctica de la marcha atrás hay algunas creencias de que puede ser efectiva si pones en práctica algunos trucos como hacerlo de pie o lavarse la vulva después. Ninguno de estos métodos impide que, si un espermatozoide ha entrado, continúe con su viaje. La eyaculación no entiende de leyes de gravedad y el semen no se destruye con agua y jabón. Orinar después del sexo tampoco nos sirve: es positivo para prevenir infecciones, pero no para prevenir embarazos.
5 razones por las que no es recomendable practicar la marcha atrás
-
Depende solo del control del hombre en un momento especialmente delicado. Es fácil y probable que, en el instante del clímax, uno esté pensando en otras cosas.
-
No estarás tranquila de su eficacia hasta la siguiente menstruación. Aunque hayas contado los días en tu calendario de fertilidad.
-
Solo un espermatozoide -presente en ese fluido preseminal- es suficiente para quedarte embarazada.
-
No evita el contagio de ITS. Recuerda que para ello es fundamental elegir un método de barrera, como el preservativo.
-
Alerta de menos placer: si estáis pendientes de la marcha atrás, puede que no disfrutéis de la relación sexual relajadamente.
Así que, amiga bloomer, en lugar de confiar en la marcha atrás, nuestro consejo es que os informéis sobre otras opciones anticonceptivas, si es necesario, con ayuda del servicio de planificación familiar. ¡Es un aspecto muy importante para disfrutar del sexo en pareja con total seguridad!
¿Te ha gustado este post?
¡Queremos saberlo!
Y también en:
Pregúntame lo que quieras
