¿Bultitos en la vulva? Así se manifiesta la hidradenitis supurativa: te contamos qué es
Vulva, ingle, axila, glúteo o bajo pecho son las zonas habituales donde se aparecen las lesiones de la hidradenitis supurativa. Diagnóstico y tratamiento.
Existen patologías y afecciones que no son comunes, pero que debemos visibilizar para darle a cada caso la importancia que merecen. Hoy hablamos de la hidradenitis supurativa vulvar (a.k.a hidrosadenitis supurativa), una enfermedad que afecta más a las mujeres que a los hombres.
Zoom a la hidradenitis supurativa
¿Qué es la hidradenitis supurativa vulvar?
La hidradenitis supurativa es una enfermedad de la piel que se manifiesta principalmente mediante bultos que tienen el aspecto de granitos. La buena noticia es que no es contagiosa (al contrario que las verrugas genitales que sí lo son), pero la mala es que suele ser crónica para quien la padece.
Aunque se puede manifestar en axilas, ingles y senos, entre otras zonas, la mayoría de las veces se habla de hidradenitis supurativa vulvar precisamente porque aparece en la zona genital.
La hidradenitis supurativa no es contagiosa, pero sí que puede ser muy dolorosa para quien la padece
Pueden asemejarse a los golondrinos, a la bartolinitis o incluso al molusco contagioso, pero no es lo mismo. La clave está en un buen diagnóstico para encontrar el tratamiento oportuno.
Síntomas de la hidrosadenitis supurativa en las mujeres
La hidrosadenitis supurativa en las mujeres suele tener un único síntoma principal y es el de desarrollar bultos duros o con pus en la piel o debajo de ella. En ocasiones, estos bultos pueden dar lugar a heridas que drenan pero no sanan y también a cicatrices graves. Normalmente es doloroso.
Se pueden tener estos bultos solo en una zona o en varias y el tamaño puede ser variable, pero en ocasiones pueden alcanzar una dimensión grande.
Causas y tratamiento de la hidradenitis supurativa vulvar
Los factores de riesgo de la hidradenitis supurativa son ser mujer, tener antecedentes familiares, fumar y tener sobrepeso. Además, etapas como la pubertad o la menopausia son los períodos más habituales en los que puede aparecer esta enfermedad.
De momento, no se conoce la causa de esta afección, aunque se suele apuntar a genética, hormonas y factores medioambientales como posibles causas.
Es muy importante destacar que la higiene, al contrario de lo que se podría pensar, no influye en la aparición de estos bultos.
El tratamiento de la hidradenitis suprativa vulvar o hidrosadenitis supurativa en mujeres se puede dar en dos ramas:
Abordar la hidradenitis supurativa
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Con medicamentos:
Tu médico puede tratar de controlar la hidradenitis supurativa vulvar mediante medicamentos como antibióticos tópicos si está localizada o antibióticos en pastillas en caso de que esté extendida o sea más grave.
La terapia hormonal, las inyecciones de esteroides o los retinoides son buenas opciones para controlar esta afección. En caso de que se necesite ayuda para el dolor, los analgésicos también pueden ser buenas opciones y están entre los medicamentos indicados, pero recuerda que, aunque muchos son de venta libre, es necesario siempre consultar con tu médico para que juntos podáis encontrar el mejor tratamiento para eliminar la afección y hacer tu vida más cómoda.
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Con cirugía:
En muchos casos se puede necesitar de procedimientos quirúrgicos para controlar la hidradenitis supurativa . Los medicamentos como antibióticos pueden ayudar, pero no siempre eliminan esta afección.
El médico te propondrá el mejor procedimiento para eliminar los bultos, entre ellos, puede valorar terapia con láser o incisión y drenaje, aunque su problema de que es habitual que vuelvan a aparecer, por lo que cada vez están más en desuso.
Otra opción que sí está dando buenos resultados es lo que se conoce como exposición de túneles. En los casos más graves, la extirpación de la piel afectada puede ser una buena alternativa, aunque también puede reaparecer la hidradenitis, en la misma zona o en otra.