Con esto no contábamos: el embarazo también puede generar dolor vaginal o vulvar, ¿debemos preocuparnos?
Calambres, presión, molestias o dolor suelen producirse durante el embarazo a medida que nuestro útero crece. ¿Cuándo preocuparse y cómo aliviarlo?
El embarazo es, claro está, un momento de muchos cambios físicos y emocionales. Las mujeres no siempre estamos preparadas para vivir esos cambios y, sobre todo, no siempre estamos conveniente informadas de lo que se nos viene encima.
Conocemos de sobra algunos síntomas habituales del embarazo como las náuseas, el aumento de sueño y hambre o las ganas constantes de hacer pis, pero de otros nadie nos ha contado nada a pesar de ser súper frecuentes, como ocurre con los dolores en la vulva o la vagina.
Las molestias y dolores en la zona pélvica y vaginal a medida que el embarazo avanza son completamente normales. No debes preocuparte si tienes molestias puntuales en la vulva o si, de repente, notas calambres en la vagina en el tercer trimestre de embarazo, pero es importante comprender por qué suceden estas molestias y cuándo hay que prestarles especial atención. Analizamos el dolor vaginal y vulvar en el embarazo.
¿Por qué se produce dolor vaginal o vulvar en el embarazo?
Muchas de nosotras sentimos calambres o molestias en la vulva a lo largo de toda nuestra vida, sobre todo cuando tenemos la regla, estamos ovulando o nos encontramos inmersas en el SPM, aunque esas molestias suelen ser bastante ligeras y asumibles.
Durante el embarazo los dolores de vulva son especialmente comunes en las mujeres en las primeras semanas de embarazo, en el segundo trimestre y, sobre todo, en el tercer trimestre de embarazo y, en algunos momentos, pueden no ser llevaderas.
En primer lugar, es importante distinguir entre el dolor de pubis o pubalgia y el dolor vulvar o vaginal porque pueden ser parecidos pero no son exactamente iguales. La pubalgia afecta a la musculatura de la zona pélvica en general y a la del pubis en particular y está provocada, sobre todo por el peso extra que tiene que asumir esta zona para sujetar al bebé.
Por otro lado, cuando hablamos de dolor vaginal o vulvar, nos referimos directamente a esa zona, propiamente dicha. Así que estos dos dolores son compatibles y es muy probable que tengas que convivir con ellos en el tercer trimestre de tu embarazo.
La principal causa que provoca el dolor de vulva en el embarazo es, como es evidente, el crecimiento del útero y el aumento de peso que tiene que asumir la zona y también los cambios posturales que se producen en el cuerpo de la madre a medida que progresa el embarazo, especialmente si hablamos de embarazos múltiples.
Otra de las causas serían los cambios en el flujo vaginal y las modificaciones que se producen en las paredes vaginales en el embarazo. Pero además tienen mucha culpa de estas molestias los cambios hormonales que vive la madre durante la gestación.
La relaxina es una hormona que solo aparece en escena en el embarazo y que va aumentando sus niveles de forma progresiva porque su misión es relajar los músculos y ligamentos del cuerpo para que cedan adecuadamente cuando llegue el parto. El hecho de que la zona se vaya relajando implica que necesita más esfuerzo para sujetar el peso y eso puede provocar molestias.
¿Cómo es el dolor vaginal en el embarazo?
La frecuencia y la intensidad de los dolores o molestias en la vagina originados por el aumento de peso del útero dependen de una mujer a otra y pueden manifestarse en forma de tensión, pinchazos o calambres genitales, dolor o molestia intermitente o durar un tiempo de forma continuada. La mayoría de las mujeres embarazadas suelen sentir estas molestias en los labios mayores y su entorno y, cuando son más intensas, puede costar caminar o estar de pie de forma puntual.
Sin embargo, hay otros dolores que pueden aparecer en la vulva durante todo el embarazo, como los producidos por las varices en la vulva a causa del incremento anormal de la vascularización o problemas de hipertrofia en la vagina producidos por un cambio muy acusado en las paredes vaginales durante algún punto de la gestación.
Aunque pueden aparecer molestias durante toda la gestación, lo más común es que el dolor vulvar producido por la presión no sea incómodo hasta el tercer trimestre y realmente incómodo cuando el bebé está colocándose boca abajo en los días previos al parto. Si sientes estas molestias intensamente antes de tiempo, deberías contárselo a tu médico para que pueda descartar un problema mayor.
¿Cómo puedes aliviar el dolor vaginal o vulvar en el embarazo?
Como ocurre siempre que hablamos de dolores musculares, lo mejor para prevenirlos es practicar hábitos saludables y estar en forma. Lo mismo ocurre con el embarazo. Si durante los dos primeros trimestres consigues estar activa y ejercitas convenientemente la zona pélvica, es menos probable que sufras dolores vulvares en la recta final del embarazo.
Tips para aliviar los dolores vaginales o vulvares:
- Aplica calor en la zona (en intervalos de pocos minutos)
- Mejora tu higiene postural aunque el peso te resulte incómodo
- Practica los ejercicios de Kegel cuando no tengas dolor
- No permanezcas demasiado tiempo de pie ni en la misma postura
- Duerme con un cojín para embarazadas que aliviará la presión vaginal
- Practica ejercicio de forma regular
- Un fisioterapeuta especializado puede ayudarte
- Controla tu peso según las directrices médicas
- Masajea la zona para relajar los músculos cuando tengas mucho dolor
- Usa cinturón pélvico, solo si tu médico o matrona te lo recomienda.