Conocemos los estrógenos como “las hormonas de los ovarios”, pero ¿lo sabemos todo de ellas?
¿Sabías que los estrógenos son las hormonas que promueven el desarrollo en la pubertad, en la salud ósea o en las funciones cognitivas de las mujeres?
Si hablamos de hormonas sexuales femeninas, hablamos de estrógenos. Todas son importantes, pero ninguna tiene un papel tan decisivo en nuestra salud a lo largo de nuestra vida como el estrógeno.
Los estrógenos marcan la madurez sexual, son las hormonas responsables del funcionamiento del ciclo menstrual, claves en la menopausia y totalmente necesarios para el desarrollo del embarazo. Pero además tienen otras funciones muy importantes, y poco conocidas, para la salud física y mental de las mujeres desde la pubertad hasta la menopausia.
Estudiamos en profundidad los estrógenos, sus niveles, sus funciones y cómo afecta esta hormona a cada etapa de nuestra vida fértil.
¿Qué son los estrógenos?
Los estrógenos son hormonas sexuales, la mayoría se forman en las glándulas suprarrenales y en los ovarios de las mujeres y se sintetizan a partir del colesterol, por lo que son hormonas sexuales esteroideas. Pero además, en momentos puntuales de nuestra vida, hay otras partes del cuerpo encargadas de liberar estrógenos como la piel, los huesos o el hígado.
Existen 3 tipos de estrógenos:
- Estradiol: es el tipo más abundante de estrógeno en nuestro organismo. Se sintetiza a partir de la testosterona.
- Estriol: es el tipo de estrógeno que se desarrolla fundamentalmente en el embarazo y se produce a partir de la androsterona.
- Estrona: se sintetiza a partir de la progesterona y es liberada en pocas cantidades por los ovarios. Durante el embarazo, también produce estrona la placenta.
¿Cuál es la función de los estrógenos?
Los estrógenos son las hormonas sexuales femeninas más importantes de nuestro organismo porque tienen un papel decisivo en todas las etapas de nuestra vida. Solos o en colaboración estrecha con otras hormonas, como la progesterona, los estrógenos son fundamentales para nuestra salud física, fisiológica y psicológica porque cumplen algunas funciones muy importantes:
- Desarrollar de la sexualidad en la pubertad
- Regular el ciclo menstrual
- Controlar de la ovulación
- Poner el cuerpo a punto para un posible embarazo
- Proteger la salud de los huesos
- Mejorar el flujo sanguíneo
- Mantener niveles adecuados de colesterol
- Prevenir enfermedades cardiovasculares
- Estimular la libido y el deseo sexual
- Evitar la sequedad vaginal
- Favorecer la producción de colágeno
- Contribuir a cuidar la salud de la piel y el cabello
- Favorecer un buen descanso
- Regular la temperatura corporal
- Procurar una salud mental estable
Por su influencia determinante en el aparato reproductor femenino, los estrógenos, combinados con otras hormonas, son el principio activo habitual de tratamientos anticonceptivos hormonales.
Así afectan los estrógenos a cada etapa de nuestra vida
Pubertad
La pubertad marca el pistoletazo de salida para los estrógenos. En la adolescencia, empiezan a funcionar los ovarios liberando, muy poco a poco, estas hormonas que resultan necesarias para alcanzar la madurez de los órganos reproductores. Los estrógenos son los encargados de activar el vello corporal, el desarrollo del pecho y la llegada de la menarquia o primera regla.
Ciclo menstrual
Los estrógenos, en concreto el estradiol, junto con la progesterona, son las hormonas encargadas de regular el ciclo menstrual. El objetivo de nuestro organismo durante toda nuestra vida fértil es preparar el cuerpo para la llegada de un hipotético embarazo. Por eso, los niveles de estrógenos aumentan durante la fase folicular y descienden cuando llega la ovulación para dar paso a la progesterona.
Muchos de los síntomas relacionados con el síndrome premenstrual (SPM), tienen mucho que ver también con los niveles bajos de estrógenos en esa fase del ciclo.
Embarazo
Cuando el óvulo se fecunda dando lugar a un embarazo, la maquinaria femenina empieza a funcionar a pleno rendimiento, en ese momento, el estradiol, la progesterona y otras hormonas femeninas tienen la misión de procurar un buen hogar para el embrión y garantizar su correcto desarrollo y por eso aumentan de forma progresiva sus niveles, alcanzando el máximo, en condiciones normales, en el tercer trimestre de embarazo.
Menopausia
Con la llegada de la perimenopausia y la menopausia, los niveles de estrógenos descienden exageradamente en nuestro organismo. El final de la vida fertil trae consigo una disminución progresiva de la producción de esta hormona por parte de los ovarios y eso provoca multitud de síntomas en las mujeres.
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¿Cómo podemos controlar los niveles de estrógenos?
Como ocurre con el resto de las hormonas sexuales femeninas, los niveles de estrógenos son muy variables y fluctúan constantemente a lo largo de la vida de una mujer.
Si no existe ninguna anomalía, los estrógenos acompañan a nuestro organismo en los momentos en los que son necesarios y desaparecen cuando dejan de ser útiles, pero las alteraciones en los niveles de estrógeno inoportunas (tanto por exceso como por defecto de esta hormona), a menudo vienen acompañadas de trastornos que deben tratarse, como en el caso de pubertad precoz, problemas de fertilidad y tratamientos de reproducción asistida, irregularidades en los ciclos menstruales, menopausia precoz, síntomas severos de la menopausia u otras patologías y enfermedades. Ante este tipo de situaciones, suele ser recomendable someterse a una analítica que mida los niveles de estrógenos en sangre.
¿Cómo regular los niveles de estrógenos?
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Ejercicio regular
Practica ejercicio de forma regular y contribuirás a mantener unos niveles adecuados de estrógenos en tu organismo.
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Stop tóxicos
El tabaco, el alcohol y otras sustancias tóxicas afectan muy directamente a la bajada de estrógenos.
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Cuida tu salud mental
El estrés provoca desequilibrios hormonales. Cuida tu salud mental en la medida de lo posible para evitar las consecuencias de un descenso brusco de estrógenos.
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Dieta rica en estrógenos
Ayudan a regular los estrógenos los alimentos ricos en vitamina C, B y fibra. La alimentación no proporciona directamente estrógenos, pero una dieta equilibrada rica en nutrientes y minerales favorece los fitoestrógenos, que actúan de forma muy parecida a los estrógenos naturales que fabrica el organismo. Refuerza tu menú diario con legumbres, semillas de lino, frutas rojas, brócoli, huevos y soja en todas sus versiones.
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Tratamientos naturales
Algunos ingredientes naturales ayudan a combatir la bajada de estrógenos en cualquier etapa de la vida de una mujer, como el aceite de onagra o la soja. Siempre bajo supervisión médica.
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Medicamentos con estrógenos
Existen muchos productos farmacológicos destinados a regular la producción de estrógenos, pero deben administrarse siempre bajo prescripción médica y valoración del estado de salud de la paciente.
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Terapia hormonal sustitutiva
En el caso de la menopausia precoz o para tratar síntomas severos de la premenopausia y la menopausia, el médico especialista podría considerar recomendable un tratamiento de terapia hormonal sustitutiva que combina una serie de hormonas sexuales femeninas.