Ghosting o el arte de desaparecer sin dar explicaciones: aprende a identificarlo
Hacer ghosting es, básicamente, desaparecer (en una relación sentimental o de amistad) sin dar explicaciones. Una práctica que denota poca responsabilidad afectiva
Escrito por Sara G. Pacho
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, estilo de vida y feminismo. Licenciada en Sociología por la Universidad de Salamanca y en Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Máster en Comunicación como Agente Histórico-Social, especialidad en Lenguaje Audiovisual por la Universidad de Valladolid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
Estás conociendo a alguien: os mandáis mensajitos, habéis tomado algo varias veces y todo va aparentemente bien, hasta que un buen día… se esfuma sin mediar palabra. Te hace un claro ghosting. «¿Qué ha pasado? ¿Qué he hecho para que me deje de hablar? ¿Habrá muerto?», te preguntas, subiendo el tono dramático. Las respuestas son nada, nada y seguramente no, aunque esta manera de desaparecer sí que tiene algo que ver con irse “al otro mundo”, concretamente al de los fantasmas.
Te contamos todo lo que tienes que saber sobre el ghosting, una práctica criminal desde un punto de vista emocional.
Qué es hacer ghosting: desaparecer sin decir adiós
El término ghosting viene del inglés ghost, que significa literalmente fantasma. Así pues, hacer ghosting podría ser algo así como hacerse el fantasma o, dicho de otra manera menos amable, desaparecer sin dar explicaciones. Esto, en la era digital, es tan “fácil” como bloquear a alguien en redes sociales, restringir sus llamadas o, simplemente, dejar de contestar a los mensajes sin previo aviso.
Esta manera tan abrupta y tan poco responsable desde el punto de vista afectivo supone un final difícil de encajar para quien lo sufre. Superar, por ejemplo, una ruptura amorosa, ya es suficientemente complicado después de tener la típica conversación de “lo dejamos” (o “te dejo”), pero, ¿cómo enfrentarse a eso sin recibir una mínima comunicación de abandono de la relación?
Según la psicología, esta manera de terminar con alguien no solo es dolorosa, sino que, al no haber un cierre formal, se hace más difícil de entender y daña la autoestima, pues nos puede llevar a preguntarnos: «¿Ha desaparecido porque no soy suficiente?»
Tipos de ghosting: tres patrones de comportamiento
Ahora que ya hemos identificado lo que es el ghosting, es el momento de decirte que existen también patrones en esto de desaparecer.
El que desaparece antes de que le conozcas
¿Puede hacerte ghosting alguien a quien nunca has visto en persona? Por supuesto que sí. Como te decíamos, esta práctica está especialmente extendida en entornos digitales, donde hacer chas y aparecer en otro lado es tan fácil como bloquear a alguien o ignorar ad eternum sus mensajes. ¿Has conocido a alguien por Tinder, estáis planteando la posibilidad de quedar en persona y de repente se esfuma sin dejar rastro? G-h-o-s-t-i-n-g.
El Guadiana
Que aparece y desaparece, vaya. Todo va bien, tenéis una relación cercana, habláis a diario, y, de repente, bola del desierto en el chat. A las semanas o meses vuelve, como si no hubiera pasado nada. Damos otra oportunidad y, al cabo de un tiempo, repite el mismo patrón. Una palabra: ¡huye!
¿Por qué decir adiós si se puede no decir nada?
Este parece el planteamiento de quienes prefieren dejar una relación, a priori seria y formal, sin necesidad de tener una conversación de cierre. Excusas, distanciamiento y desaparición. Fin de la historia y un «the end» difícil de encajar para quien lo sufre.
Perfil de persona que hace ghosting o cómo identificar esas actitudes
¿Se puede prevenir el ghosting? ¿Podemos verlo venir? Lo cierto es que resulta complicado adelantarse a esta práctica, pero sí que algunas red flags capaces de hacernos levantar la ceja y llevarnos a reaccionar antes de que sea tarde.
Según la psicología, el tipo de personas que frecuentan esta manera de terminar con sus relaciones suelen ser narcisistas y poco empáticas, y con apego evitativo. Auténticas joyas emocionales, efectivamente.
Quien hace ghosting no repara en que la persona a la que está dejando con doble tick azul en Whatsapp o sacando de su vida a las bravas es algo más que un perfil de Instagram. La falta de madurez también puede darnos la alerta: ¿tiene una manera infantil de relacionarse contigo y no muestra preocupación por tus sentimientos? Vemos ondear las banderas rojas.
¿Los amigos también hacen ghosting?
Aunque durante todo este artículo hemos hablado de relaciones de pareja, también entre amigos hay situaciones de ghosting. Al final, se trata de alejarse de algo sin dar ningún tipo de explicación para que la otra persona entienda qué sucede.
¿Cómo enfrentarlo? Por respeto, quizá lo más sensato sea intentar averiguar si pasa algo que obligue a esta persona a alejarse de esta manera. Una vez descartada esta opción, empieza el trabajo personal: como en cualquier tipo de ghosting, tenemos que recordar que la acción de una persona no define lo que valemos, que no tenemos que justificar actitudes que no son justificables y que, si es necesario, podemos pedir ayuda profesional.
Ya sabes: no hagas a nadie lo que no te gusta que te hagan a ti. La responsabilidad afectiva es propia de personas honestas, maduras y capaces de gestionar sus emociones, por muy duras que sean.
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