Menarquia: qué es y cuales son los síntomas de la primera regla
La primera regla tiene un nombre: menarquia. Estos son sus síntomas y nuestros consejos (de amiga) para afrontarla. ¡Toma nota!
Escrito por Isabel Sauras
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, cultura y estilo de vida. Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad CEU San Pablo de Madrid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
La vida fértil de una mujer comienza con la menarquia y cierra su ciclo con la menopausia. La menarquia es la primera regla y marca el momento justo en el que el cuerpo de una niña alcanza su madurez y se prepara para ser madre algún día (si es que así lo decide, por supuesto).
Muchas veces, nos enfrentamos a este momento con miedo, con vergüenza e incluso con ansiedad ante lo desconocido. Para sobrellevar este cambio con naturalidad, lo mejor es estar bien informada y bien preparada. ¡Te lo ponemos fácil en Bloom!
¿Qué es la menarquia? Familiarizándonos con la menstruación
La palabra menarquia, del griego mes-principio, define el primer sangrado vaginal de una niña o adolescente, es decir, su primera menstruación.
Podemos decir entonces que la menarquia marca el cambio de la niñez a la pubertad. Esto significa que, por primera vez, el tejido que recubre el útero (endometrio) y la sangre que lo nutre, se desprenden del cuerpo con el objetivo de renovarse. A partir de este momento, la regla o menstruación se repetirá cada ciclo durante toda la vida fértil de una mujer hasta llegar a la menopausia.
Si eres tú la que afronta su primera regla, recuerda que lo ideal es que antes de que llegue ese momento ya te hayas informado de cómo debes actuar y qué productos de higiene femenina están a tu disposición para que no te pille desprevenida. La menarquia es, en realidad, una buena noticia porque significa que tu cuerpo funciona correctamente y que todo está como tiene que estar.
La menarquia supone un antes y un después en el cuerpo de una mujer y suele venir acompañada de otros cambios no solo físicos, sino también psicológicos. Asumirlos no siempre es una tarea sencilla, así que déjate ayudar y apoyar y pregunta todas las dudas que tengas a una persona de confianza (tu madre, tu hermana o tus amigas) o a tu especialista.
¿A qué edad suele llegar la menarquia? De los 10 a los 15 años
No se puede generalizar. Cada niña o adolescente tiene unas características, un entorno y unas circunstancias distintas, por eso la edad a la que llega la menarquia puede oscilar bastante de una persona a otra.
Actualmente, la edad media se sitúa en los 12 años y entraría dentro de lo habitual que llegara entre los 10 y los 15 años. Pero esta edad ha ido cambiando progresivamente en las últimas décadas y, si preguntas a tu madre o a tu abuela, descubrirás que, probablemente, a ellas les llegó mucho más tarde que a ti y a tus amigas.
Parece evidente que este adelanto en la edad a la que se empieza a menstruar responde a nuestros hábitos alimenticios y al estilo de vida actual. De hecho, cada vez hay más casos de pubertad precoz o menarquia precoz, es decir, niñas que se desarrollan antes de lo habitual y que tienen su primera regla en torno a los 8 o 9 años.
Este adelanto puede estar provocado por causas como la obesidad, el consumo excesivo de grasas o el sedentarismo, pero también por los químicos y tóxicos que están presentes en los materiales y alimentos que tenemos a nuestro alcance y que influyen en las hormonas: los llamados disruptores endocrinos.
Aunque puede tener algunas consecuencias en la salud de la niña, la menarquia precoz no es, a priori, un problema grave. Pero el tema fundamental es que una niña de ocho o nueve años no está, por lo general, preparada psicológicamente para recibir este cambio, por lo que necesitará más apoyo emocional. En caso de menarquia precoz, lo más conveniente es consultar con un ginecólogo que pueda valorar el caso y aconsejarnos una pauta adecuada.
En caso de menarquia precoz, lo más conveniente es consultar con un ginecólogo que pueda valorar el caso y aconsejarnos una pauta adecuada.
Síntomas previos a la menarquia: señales que anticipan la regla
La menarquia viene precedida de dos o tres años de cambios físicos provocados por el incremento de las hormonas femeninas, así que, por lo general, cuando llega no debería sorprendernos mucho. Algunas de esas señales son:
- Botón mamario. Es la primera en aparecer. Progresivamente se va notando el pezón algo inflamado y ligeramente elevado y la areola también cambia de tamaño. Lo normal es, además, que aumente la sensibilidad en esa zona.
- Aparición de vello corporal, especialmente en la zona del pubis y en las axilas.
- Es muy habitual que cambie la piel y que empiece a aparecer un principio de acné en la cara y en zonas como el escote y la espalda.
- En esta etapa, las niñas experimentan un crecimiento rápido, el típico estirón.
- Aumento del peso y ensanchamiento leve de la cintura y la cadera.
- Junto con los síntomas físicos, es normal sentir algunos cambios incontrolables en el carácter. Tranquila, no eres tú, son tus hormonas…
¿Qué pasa después de la menarquia?
La llegada de la menarquia marca el principio de la edad fértil de una mujer. A partir de entonces, cada 28 días (aproximadamente) se repetirá la menstruación hasta que llegue la menopausia y se retire para siempre. Sin embargo, es muy común que durante los dos o tres primeros años de regla no se produzca ovulación y la menstruación sea irregular, tanto en la cantidad de sangrado como en la duración de los ciclos.
Esto es así hasta que la producción de hormonas se hace regular. Poco a poco se va estabilizando, pero, por diversas circunstancias, hay mujeres que nunca llegan a tener una regla regular en toda su vida. Estas primeras menstruaciones no suelen ser muy dolorosas, aunque es normal notar ciertas molestias en el bajo vientre y en los ovarios.
En cuanto al crecimiento, existe el falso mito de que las niñas ya no crecen más después de la menarquia, pero esto no es cierto. Después del inicio de la pubertad y la menarquia, una adolescente sigue creciendo entre 4 y 12 cm de media en los siguientes 2 o 3 años.
En lo emocional, la adolescencia es una etapa muy complicada. Al desarreglo hormonal que se convierte en una montaña rusa de emociones se une la madurez cerebral y la búsqueda de una identidad propia. Aunque se ha evolucionado mucho, normalizar y desmitificar la regla es una tarea pendiente en la sociedad, y la educación por parte de las familias y de los colegios es fundamental en este camino. Apoyo, comprensión y acompañamiento son claves en esta etapa.
¿Cuándo acudir por primera vez a un ginecólogo?
En principio, no sería necesario acudir a la consulta de un ginecólogo hasta los 14 o 15 años o cuando hayas comenzado a tener relaciones sexuales. Sin embargo, sería conveniente someterse a un chequeo en el caso de que las reglas sean demasiado dolorosas, duren muchos días o sean excesivamente intensas. También si, pasados tres años de la menarquia, la menstruación no ha adquirido cierta regularidad.
Para descartar problemas en el futuro, en el caso de que la menarquia sea precoz o demasiado tardía, también sería conveniente una revisión ginecológica más temprana. ¿Y cómo afrontar esas consultas? Con tranquilidad, calma y seguridad: son profesionales que buscan ayudarte y cuidar de tu salud. ¡Y todas pasamos antes o después por eso!
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