Gripe menstrual, ¿por qué enfermamos justo antes de la regla?
Es más común de lo que pensamos aunque no existe mucha evidencia científica al respecto todavía.
Escrito por Sara G. Pacho
Redactora de Bloom especializada en salud femenina, estilo de vida y feminismo. Licenciada en Sociología por la Universidad de Salamanca y en Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Máster en Comunicación como Agente Histórico-Social, especialidad en Lenguaje Audiovisual por la Universidad de Valladolid.
Revisado por el equipo de expertas de Bloom, plataforma especializada en salud femenina.
¿Sabías que a la incomodidad y los dolores que supone tener la regla para muchas de nosotras se puede sumar la posibilidad de sufrir una especie de gripe en los días anteriores? Nos referimos a la gripe menstrual para hablar de los síntomas similares a los de esta enfermedad (aunque en este caso no responde a un proceso vírico o bacteriano) que podemos sufrir justo antes de que nos baje la regla o durante los días de sangrado.
No siempre se reconoce como tal en consulta médica (¿falta un pelín de enfoque de género al tratar las dolencias?), pero es más habitual de lo que crees. Así que si te pasa: no estás sola, ni estás loca, bloomer.
Gripe premenstrual, ¿qué es?
Los síntomas son parecidos a una gripe, digamos, común: dolor de cabeza, fiebre, molestias musculares y articulares, naúseas… Pero no la provoca un virus o una bacteria. Lo que comúnmente puede denominarse como gripe menstrual -aunque no es un término que se recoja desde un punto de vista médico- es, en realidad, el SPM (síndrome premenstrual) haciendo de las suyas.
Los cambios hormonales que vivimos en los días antes de tener el periodo pueden conllevar diferente sintomatología física y emocional. El abanico es amplio y a cada una nos afecta de una manera. En cualquier caso, lo habitual es que estos síntomas aparezcan unos días antes de que nos baje la regla -entre cinco y siete, aproximadamente- y desaparezcan cuando empezamos a manchar.
En el caso de la llamada gripe menstrual, es posible que notemos sus señales un poco antes y se intensifiquen en estos días previos a la menstruación.
Causas de la gripe menstrual
No hay mucha evidencia científica al respecto, ya que no hay suficientes estudios como para señalar si nuestro ciclo menstrual afecta al sistema inmunitario provocando esta reacción. Unas voces apuntan a las hormonas como las responsables de la fluctuación de las defensas que nos hacen caer o sentirnos enfermas.
Un estudio de 2018 basado en los síntomas registrados por mujeres en una app de seguimiento del ciclo concluía que en estos días muchas usuarias padecían síntomas de enfermedades subyacentes con esta sintomatología, como malestar intestinal, enfermedades autoinmunes o epilepsia en los casos más graves.
Otra vertiente es la que recoge el periódico New York Times: Taraneh Shirazian, una ginecóloga del hospital Langone Health de la Universidad de Nueva York, afirma que esta gripe menstrual es la respuesta del cuerpo a la inflamación natural de esos días, cuando el útero se contrae y desprende células.
¿Se puede tratar la gripe menstrual?
Si al leer estas líneas has pensado aquello de “¡esto me pasa a mí!”, lo ideal es que acudas a consulta médica y expliques los síntomas, cuándo aparecen en relación al periodo y cuándo terminan, para que una o un profesional de la salud determine si es necesario realizar pruebas diagnósticas. Por lo demás, las recomendaciones son muy similares siempre que nuestro cuerpo nos alerta de que algo no va bien:
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Cuida tu alimentación
Consumir una dieta rica en vegetales, frutas, legumbres, cereales integrales, semillas y frutos secos es beneficioso para tener una buena salud y puede ayudar a controlar los síntomas de esta gripe menstrual.
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Evita la cafeína y el consumo de alcohol
Especialmente durante los días que no te sientes bien.
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Acuérdate de hidratarte correctamente
La intensidad del dolor es variable en función del agua que bebemos al día, según reflejan algunos estudios.
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Actividad física adecuada
No es momento de hacer ejercicio de alta intensidad, pero tampoco de ver la vida pasar desde el sofá. Una caminata, una sesión de yoga suave, running ligero…
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Duerme tus 8 horas
Haz tu rutina de higiene del sueño y procura tener un descanso suficiente y de calidad.
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Uso de fármacos
Solo si tu especialista te lo recomienda, puedes tomar medicamentos para el dolor o la inflamación.
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