ITS y ETS

¿ITS? ¿ETS? Sí, aquí nadie se libra. Todo sobre las infecciones de transmisión sexual y las posibles enfermedades de transmisión sexual en un único espacio. Porque cuanto más sepas sobre ellas, mejor podrás esquivarlas, tratarlas y normalizarlas. ¡Hay mucho por aprender!

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Todo sobre ITS y ETS

Es habitual confundir ambos términos, pero, aunque estén relacionados, son diferentes. Las ITS son las infecciones de transmisión sexual, pero cuando estas pasan a ser enfermedad se llaman ETS. Es posible tener una ITS sin ETS, pero no al revés.

No hay diferencias en la transmisión de las ITS y las ETS. En ambos casos se pueden transmitir por contacto sexual, tanto por sexo oral, vaginal o anal.

La prevención es clave para evitar estas infecciones. Los métodos de protección de barrera son la clave, siendo el preservativo masculino el más utilizado actualmente.

> Más sobre las diferencias de las ITS y ETS

Tipos de infecciones de transmisión sexual

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al día más de un millón de personas contraen una ITS en todo el mundo. Existen muchos tipos de infecciones de transmisión sexual, pero las más importantes en cuanto a volumen de contagios son la gonorrea y la clamidia. La sifilis, el VPH o el VIH completan el top 5 de Infecciones de Transmisión Sexual más comunes.

Aunque los datos suelen ser bastante similares en hombres y en mujeres, es interesante mencionar que la gonorrea o la clamidia tienen una mayor prevalencia en mujeres, mientras que el VIH o la sífilis son más habituales en hombres.

> Más sobre las ITS más comunes

¿Cómo saber si tengo riesgo de contagiarme?

El riesgo de contagio de una ITS aumenta con la penetración anal, vaginal y oral. Compartir juguetes sexuales también puede favorecer este contagio.

No existe el riesgo cero: todas las personas sexualmente activas pueden estar expuestas a una ITS, sin embargo, las probabilidades se reducen drásticamente si se utilizan métodos de protección de barrera.

> Más sobre la transmisión de las ITS en el sexo oral

Síntomas comunes de las ITS

Los síntomas comunes de las Infecciones de Transmisión Sexual pueden variar en función del tipo de infección y también de la persona, pero hay ciertos indicadores que pueden hacer sospechar. Estos son algunos de los síntomas más habituales:

  • Dolor o molestias al orinar
  • Fiebre
  • Dolor de garganta
  • Sarpullido
  • Ronchas en la piel
  • Sangrado entre reglas

Diferenciar una ITS de una infección de orina, por ejemplo, o cualquier otra patología puede ser complicado, por lo que siempre es importante acudir al médico con toda la información posible para que, en base a nuestros síntomas, realice las pruebas necesarias.

> Más sobre verrugas genitales que no son VPH

¿Cuándo acudir al médico? Diagnóstico de ITS

Si se han tenido relaciones sexuales sin protección y se experimentan algunos de los síntomas de las ITS, es interesante acudir al médico para que, mediante las pruebas pertinentes, pueda realizar un diagnóstico.

También es importante no caer en un estado de alarma innecesario: hoy en día, la mayoría de estas infecciones tienen tratamiento. Para ello es importante que un médico especialista, mediante el diagnóstico, escoja la mejor opción para cada caso.

Con el diagnóstico de una ITS en la mano, la clave está en seguir el tratamiento al pie de la letra y no interrumpirlo por cuenta propia, incluso si ya han remitido los síntomas. Además, no hay que olvidar que las reinfecciones son posibles.

> Más sobre el diagnóstico de las ITS

Cifras en España

Según el Observatorio Bloom de ITS en mujeres en España, entre 2012 y 2019 los casos se dispararon más de un 1000% en este periodo. Este dato es especialmente significativo entre las mujeres jóvenes entre 15 y 24 años, quienes acumulan aproximadamente la mitad de los casos registrados.

La clamidia es el tipo de infección predominante, mientras que la hepatitis B y el VIH tienen cada vez menos presencia. Una de las claves está en la educación sexual, una asignatura pendiente todavía en la actualidad. De hecho, un 70% de las mujeres encuestadas en dicho Observatorio afirma que su conocimiento sobre las ITS es deficiente.

> Más sobre el Observatorio Bloom de ITS en mujeres en España

Importancia de la prevención

Se puede prevenir una ITS con el uso de anticonceptivos de barrera; aunque no hay ningún método 100% efectivo, la prevención es clave para evitar este tipo de infecciones. Una buena educación sexual es importante para tener la información sobre la mesa y poder elegir la opción más adecuada para cada persona.

Los métodos anticonceptivos de barrera deben ponerse desde el principio de la relación sexual, ya que estas infecciones no solo se transmiten por la penetración.

Algunas ITS tienen en la vacunación su prevención, como el VPH, una vacuna recomendada para niñas y niños a partir de los nueve años.

> Más sobre la vacuna contra el VPH